Toma mucho por muy poco

Seguramente, más de alguna vez te has sentido agobiado por tu estilo de vida, llega a ser aburrido, monótono, sin sentido, entre otros adjetivos que solo te hacen desear salir con amigos a disfrutar de un lugar agradable donde puedan conversar con un rico bebestible a su lado y así poder olvidarte un instante de todo el estrés que llevas sobre tus hombros.

Lamentablemente, a veces tu bolsillo no acompaña tus intenciones. A más de alguno le ha pasado y no debes sentirte mal por ello, porque a continuación vas a conocer la salvación a todos tus problemas.

Esta es la fachada que te espera para saciar tu sed con los mejores precios del lugar. (Fotografía: José Olmos)

Sí, lo que leíste es verdad, existe un lugar donde puedes beber y pasar un rato agradable con quien desees a un bajo precio, sin quitarle calidad a tus bebidas. En este lugar, vas a poder encontrar una gran variedad de bebidas alcohólicas, destacando el “pitcher” de cerveza, el famoso “Terremoto”, la borgoña y sin olvidar a la ya clásica michelada.

Por otro lado, si eres de los que necesitan “picotear” algo mientras bebes con tu/s acompañante/s el lugar también te ofrece un menú bastante variado y con una buena relación precio/calidad, con precios que fluctúan entre los 2.200 pesos, por un completo acompañado de un shop de cerveza o una exquisita parrillada para disfrutar entre dos o más personas por 15.000 pesos. Pese a eso también existen gran cantidad de platos que puedes disfrutar por diversos precios.

La mejor oferta de Santiago. Una chorrillana y un pitcher
que te quitarán la sed.
(Fotografía: José Olmos)

Pero, la estrella del lugar es sin duda el pitcher acompañado por una chorrillana, o simplemente papas fritas. Por $6.500 pesos, la porción de este plato es suficiente para que dos personas puedan comer tranquilamente del mismo, incluso puede alcanzar para tres, dependiendo de la cantidad que coma y/o beba cada uno. Pero el alcohol no es un problema en el local, por lo que rápidamente te llevarán otro pitcher, u otro bebestible, a tu mesa, en caso de que sea necesario para seguir disfrutando de la velada.

Este es el interior del local.
(Fotografía: Gentileza El Rincón del Sabor)

La música es otro punto a destacar, ya que el local cuenta con la famosa “rocola” en la que tú puedes seleccionar una canción que te acompañará durante tu estadía, en ella se encuentran diversos éxitos musicales de distintas épocas, por lo que es muy difícil que no puedas encontrar un tema que no sea de tu agrado. Pese a eso, en el lugar también se encuentra un televisor, en el cual se proyectan varios videos musicales, generalmente, de la época de los 80's y 90's. Además, en el local también se  proyectan los partidos más interesantes del fin de semana, por lo que, si eres futbolero, este local también puede ser una opción para ti.

Si quieres “bajar” todo lo comido y bebido, el local no cuenta con un lugar específico para el baile, pero igual te las puedes ingeniar para poder bailar en uno de los rincones del lugar. Basta que suene un tema con un gran ritmo y, casi al instante, todos improvisan un salón de baile sin mayor problema.

El Rincón del Sabor es el nombre de este maravilloso local y se encuentra a cuadras del metro Baquedano, punto de encuentro entre las líneas 1 y 5, por lo que ninguno de tus amigos encontrará excusas para no ir.

Ya sabes, el Pub-Restaurante El Rincón del Sabor te esperan todos los días, hasta altas horas de la noche, para que vayas a disfrutar con sus buenos precios, sin dejar de lado la calidad de los productos que ingieras.  El local se encuentra en Avda. Libertador Bernardo O`Higgins 131, Santiago.

Además, el local cuenta con un paradero del transantiago, por lo que si tomas uno de los recorridos que puedes observar en la foto te puedes bajar directamente en la entrada del local, en caso de que vengas desde el sector oriente, o en la vereda del frente, en caso de que vengas del sector poniente.

Ubicación: Avenida Libertador Bernardo O´Higgins 131

Horarios: 10:00 a 1:00 todos los días

Recomendación: Chorrillana con Pitcher

Por José Olmos