Mulan: la historia de una guerrera
Cada vez que me preguntan por mi película favorita me quedo pensando por un largo momento y luego, una sensación de pánico se apodera de mí. Nunca he tenido la capacidad de escoger sólo una. Una sola película, una sola canción, solo un actor o actriz… nada. Pero esta decisión se vuelve un poco más simple cuando la elección debe respetar ciertos parámetros, en este caso que sea de Disney.
Lo cierto es que me encantan las
películas animadas y las que pertenecen a esta empresa en general, pero si debo
escoger una, creo que podría decir que mi preferida es Mulan. Esta fue estrenada
en 1998, dirigida por Tony Bancroft y Barry Cook y producida por Walt Disney
Pictures.
La trama general de la película
cuenta la historia de Fa Mulan, una joven de origen chino, quien se entera de
que su padre deberá ir a la guerra para luchar por su nación en contra de los
hunos. Antes de que aquello sucediera, la muchacha ya sentía que había
deshonrado a su familia al no ser una fiel representación de cómo debía ser una
mujer. Esto luego de ser rechazada por la casamentera del pueblo. Cuando Mulan
se entera de que su padre, en un claro mal estado de salud, debe representar a
su familia y pelear en una guerra, no lo piensa dos veces y decide tomar su
lugar. Desde allí, Mulan se presenta para todos en el ejército como Ping, el
hijo al cual su padre, Fa Zhou, nunca menciona.
Durante el tiempo que dura el entrenamiento, la joven mejora considerablemente su condición física, llegando a utilizar las técnicas de pelea igual, e incluso mejor, que algunos de sus compañeros. Pero, por otro lado, comienza a sentirse atraída por Li Shang, el capitán de la tropa. Finalmente, el engaño de la joven es descubierto y es expulsada “deshonrando” aún más a su familia.
Durante el tiempo que dura el entrenamiento, la joven mejora considerablemente su condición física, llegando a utilizar las técnicas de pelea igual, e incluso mejor, que algunos de sus compañeros. Pero, por otro lado, comienza a sentirse atraída por Li Shang, el capitán de la tropa. Finalmente, el engaño de la joven es descubierto y es expulsada “deshonrando” aún más a su familia.
Señalé hace un rato que podría
decir que se me hace difícil escoger solo una película favorita de Disney, pero
la que más se acercaría a ello, por distintas razones, es Mulan.
Lo que más me gusta de la
película es la personalidad de la protagonista. El cómo hace lo que sea con tal
de proteger a los suyos. Incluso arriesgando su propia vida. Además de ser muy
terca y no dejarse llevar por lo que, se supone, es lo correcto. Yo creo que a
ella no le importa mucho lo que diga el resto, pero sí su familia, le gusta
cuidarlos y sentir que merece tenerlos. Por otro lado, me gusta que no sea de
las princesas comunes de antes, que dependían totalmente de los príncipes y se
mostraban indefensas ante cualquier situación.
Otro aspecto que me gusta mucho
son las canciones. De hecho, por eso me di cuenta de que en realidad me gustaba
esta película, cuando mientras la veía noté que me sabía las letras y las
cantaba, a medida que iban apareciendo. Por lo general, se trata de canciones
que van acorde con la situación que va ocurriendo en la historia y no son
muchas, por lo que no es agotador como quizás lo sería si fuera más cercana a
un musical.
El último punto que hace de esta producción una de mis favoritas es el de los personajes secundarios. Creo que, a pesar de ser Mulan la protagonista, existe uno que destaca y se lleva la misma importancia. Ese es Mushu, el “dragón de bolsillo” que se encarga de “cuidarla” durante su aventura. En este sentido, se parece bastante al burro de Shrek o a Sid de La Era del Hielo. Es un personaje deslenguado, gracioso y que es el responsable de varias situaciones que van apareciendo en el transcurso de la historia. También está Crick Kee, un grillo “de la suerte” que si bien no habla, forma parte importante en la historia y se convierte en un compañero fiel de Mushu y, a la vez, de la joven. Finalmente, los amigos que logra hacer en el ejército Chien Po, Yao y Ling, quienes al comienzo no lo quieren (recordando que se presentó como hombre), pero terminan por formar una gran amistad, que se fortalece aún más en la segunda parte de la película.
Creo que Mulan nos enseña a luchar
por lo que creemos y a tomar el valor para cumplirlo. Además de rescatar la
importancia de la familia para ella. Como señalé anteriormente, creo que tiene
una personalidad muy noble y no le importa salir perjudicada con el propósito
de ayudar a su gente. En lo personal, yo no soy así, por lo que admiro bastante
a ese tipo de personas y aunque se trate sólo de un personaje, no estaría mal
aprender de ella.
Por Daniela Cortés


Concuerdo, sobre todo con lo mucho que te gusta esta película, a mi me encantaba verla desde pequeña. Desde el inicio hasta el final de la trama, pasando por la posición de Mulan hasta sus canciones principales, me parecen diferentes y que aumentan la belleza de esta película.
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