KYLIE, LES FOLIES TOUR

por Erik Salazar

Si hiciéramos una encuesta para conocer a la personalidad australiana más conocida en el arte de la música, la mayoría de encuestados contestarían por Kylie Minogue. Una cantante que, hasta la fecha, ha vendido más de ochenta millones de discos y que cuenta con grandes giras musicales a sus espaldas. Sus años de carrera musical demuestran sus tablas en el escenario en cada tour que realiza.

Uno de sus tours más memorables por su cuidada estética fue Les Folies Tour, que fue el colofón a su undécimo disco Aphrodite. Una de sus paradas la hizo en el Palau Sant Jordi de Barcelona, donde actuó ante un abarrotado estadio frente a 18.000 personas.

El espectáculo comenzó con una puntualidad inglesa característica de Kylie. Los primeros acordes hicieron vibrar al auditorio, que se convirtió en una ola de aplausos en cuanto se escuchó la voz de la cantante australiana mientras hacía aparición en el escenario.

Kylie demostró, una vez más, la mujer fuerte que es. Su chorro de voz no defraudó a nadie, y es que la diva del país oceánico demostró canción tras canción que seguía estando en plena forma y que lo suyo es la música. Una verdadera estrella que no necesita ni arreglos de estudio ni tampoco abusar del llamado playback.

Sus seguidores se hallaban deseosos de escuchar las nuevas canciones de aquel disco, el primero con el que volvía con fuerza tras haber superado un cáncer. Uno de los momentos más memorables fue la actuación All the lovers, que fue la que cerró el evento en un gran espectáculo de luz, agua y acrobacias imposibles. Pero no faltó tiempo para que canciones tan conocidas del nuevo disco como Get outta my way o Closer.

El concierto de esta gira causó gran admiración entre el público debido a la cuidada estética, inspirada en la antigua Grecia, de la que hacían gala los decorados y el atuendo de la cantante y todos y cada uno de los bailarines. Los cambios de vestuario en Kylie fueron constantes durante todo el evento y causaron gran impresión, debido a la imposible estética de algunos de ellos.

Pero no todo fue presentar el nuevo trabajo. La cantante también hizo las delicias de sus fans más adultos al ofrecerles un variado repertorio de sus temás más antiguos y a la vez más conocidos. Canciones que ya son historia como Can’t get out of my head, Your disco needs you, In my arms o Love at first sight, entre otras, resonaron entre los vítores y aplausos de los allí presentes.

Uno de los momentos más emotivos de la noche, vivido solamente en el concierto de Barcelona, fue cuando la cantante se acercó al público, donde se encontraba su por entonces pareja el modelo balear Andrés Velencoso, y se deshicieron en un apasionado beso ante el público que abarrotaba el estadio.

Les Folies Tour supuso el regreso a los escenarios de una de las artistas más consagradas del panorama musical. Y puede decirse que lo hizo por la puerta grande vistas las positivas críticas que recibió por parte del mundo musical. Una gira elegante, de entrada asequible para el precio que suelen tener este tipo de eventos, abierta a los fans más devotos de la cantante y también al nuevo público. Un espectáculo ameno que duró algo más de dos horas y que sirvió para que muchos de sus fans se quitaran la espinita clavada tras la suspensión de la anterior gira de la cantante debido a la enfermedad que estaba padeciendo. Un espectáculo recomendable tanto para adultos como para adolescentes. Kylie Minogue nunca defrauda, y aquella noche tampoco lo hizo, demostrando a todos los asistentes sus múltiples facetas como cantante. En breves palabras, una estrella que brilla con luz propia.