La Venganza del Sith: Una oda a como no hacer una precuela

por Daniel Caro

El año es 1997. La historia es de George Lucas, la banda sonora de John Williams y los protagonistas son Mark Hamill, Harrison Ford y Carrie Fisher. Es, talvez la mejor película de ciencia ficción que alguien pudo inventar, Star Wars, pero ¿No fue hecha veinte años antes? Si, pero ese año y por motivo del vigésimo aniversario se volvió a ver en la pantalla grande.
Me acuerdo, porque fue la primera película que fuimos a ver al cine. Antes, había visto cientos, en la casa, en la sala donde mi padre tenía por lo menos cincuenta rollos de diferentes películas, como Jurasic Park o Tiburón. Pero esa es otra historia.
La chica bonita, el héroe guapo y el malo (que ese si era malo, no ese pseudo malvado del episodio VII que no le llega ni a los talones a Vader). Star Wars era la clásica película gringa, y aunque mucho le podemos criticar, a todos nos encanta. Me crié jugando a ser un Jedi, soñaba con poder ver en combate al anciano maestro Yoda o conocer a Anakin Skywalker, antes de ser el villano más malvado de la historia.
Y dos años después, al fin en Hollywood me dieron el gusto, y no solo a mí, sino que a todos los fanáticos de la trilogía. En el año 1999 se estrenó la primera de tres películas precuelas de la original Star Wars, centradas en la historia de un tal Anakin Skywalker. Mi joven corazón, en ese momento, casi revienta. “La amenaza fantasma” (1999), “el ataque de los clones” (2002) y “la venganza del Sith” (2005) darían vida a esa historia.
Pero debo decir, después de los años, que no he visto película más mala que Star Wars: La venganza del Sith. En un par de palabras, y parafraseando a un trío de buenos muchachos, es “il peggior film della storia del cinema”.
Y es que si la amenaza fantasma fue mala y el ataque de los clones algo subió su nivel pero dejó más dudas que aciertos, la venganza del Sith es definitivamente un bodrio espantoso. Pero seamos justos, no es tan mala, tiene buenos efectos, batallas y personajes como Christopher Lee personificando al Conde Dooku. La película tiene dos grandes fallas, no tiene nada de suspenso y no se logra entrelazar de forma decente con “Una nueva esperanza” (algo si realizado en Rogue One). Pero vamos por parte.
Primero la inclusión de varios jedis, entre ellos, quien personifica de gran manera Samuel L. Jacson, el maestro Windu, el jedi más poderoso de todos (¿Y si era tan poderoso por qué se murió? Se preguntaría un gran sabio). Todos sabíamos que Windu moría, no había ningún drama ahí. Y más aún, todos sabíamos que moría el maestro Ki Adi Mundi y el maestro Adi Gallia y el maestro Plo Koon (debo decir que fue la muerte que más pena me dio) por obvias razones, ninguno apareció en Star Wars IV. Con eso ya se dice todo.
Segundo, las batallas de Yoda contra el emperador y de Darth Vader contra Kenovi, son las batallas menos emocionantes que pudimos ver en una larga lista de muy buenas batallas diría yo, pero que los cuatro debían seguir vivo, eso era imprescindible (¿Por qué? Ah, porque los cuatro salen en la primera trilogía). Ahora, las batallas tienen muchos efectos especiales y grandes movimientos de hábiles espadachines. Lo que tampoco es tan bueno porque uno se pregunta entonces ¿Por qué la batalla de Darth Vader y el viejo Ben Kenovi en la original Star Wars, es tan mala? Según George Lucas esto se debió a que Vader era mitad robot y Kenovi muy viejo. Muy rebuscado pienso yo. Finalmente, son solo los efectos los culpables.
Tercero, la larga lista de incongruencias entre la trilogía original y las tres cintas que luego le fueron adosadas y que concluyeron con “La venganza del Sith”. Solo a modo de ejemplo, en el episodio VI, Leia le comenta a Luke que su madre era hermosa pero siempre estaba triste, pero como pudo haberlo sabido si Padme murió en el parto en el episodio III. Ridículo.
Para terminar esta pequeña reseña de, tan  solo, un pobre fan, no puedo decir nada más que dos cosas. Primero, por favor, cambien al personal para los Spin Off de Boba Fet y de Han Solo, para que no vuelva a pasar lo mismo que el episodio III, y segundo, aunque Lucas y compañía no lograron con “la venganza del Sith” realizar las mismas obras maestras que en los años ochenta, se han rectificado de gran manera en los últimos años con Star Wars VII, Rogue One, y las series de “The Clone Wars” y “Star Wars Rebels”. Así que no condenaremos a Lucasfilm (gracias Disney) y como diría el gran Vader: “Disculpa aceptada Lucas”.

Comentarios

Entradas populares