El reggaetón feminista de Becky G

Es más que sabido que este género musical es bastante (completamente) explícito. Las canciones hablan de sexo, drogas y mujeres, pero mujeres como objetos o cosas pertenecientes a los hombres. Nos hemos acostumbrado y en más de alguna ocasión hemos escuchado a alguien intentando defender estas aberraciones diciendo “pero si solo es una canción”. Si, efectivamente solo es una canción. Solo una canción que lidera las listas de reproducción en Spotify. Solo una canción que tiene millones y millones de visitas en Youtube. Solo una canción que repiten niños de 7 años junto a sus compañeritos de curso.

Tal vez, no hay mucho que hacer al respecto. El género está más que reafirmado y aceptado. No vamos a conseguir que los temas hablen de otras cosas ni que cambien su perspectiva machista. Pero hay una cantante que eligió un camino distinto.

Becky G aparte de dedicarse a la música, también es actriz y modelo. Con tan solo 20 años ha logrado posicionarse en la industria musical. En 2012 comenzó a hacer colaboraciones con artistas como Cody Simpson y Will.I.Am, para luego seguir incursionando por su propia cuenta. Pero en julio de este año sacó una canción que dejó a todos impactados.

Fotografía de Becky G, cuyo nombre real es Rebbeca Marie Gómez
Mayores llegó a romper un montón de paradigmas que ya estaban establecidos. De partida, son pocas las mujeres que cantan reggaetón, quienes lo han hecho, generalmente es en conjunto con un hombre que siempre es el artista principal. Las mujeres suelen ser el adorno. En este caso, Becky G es la cantante y Bad Bunny (ícono del trap y la nueva revolución) aparece junto a ella solo como acompañante.

Pero si esto ya es novedoso, hay que empezar a desmenuzar la canción. Parte así: “A mi me gusta, que me traten como dama, aunque de eso se me olvide cuando estamos en la cama”. Una mujer hablando de sexo. ¿Esto no era tema de los hombres? Parece que solo ellos pueden comentar sus experiencias sexuales libremente, pero el género femenino debe callarse por temor a lo que el resto piense. Pero a ella no le interesa el qué dirán. Quiere hablar y lo hará.


Imagen del video Mayores de Becky G ft Bad Bunny

Luego, habla de cómo le gustan los hombres. Sí, las mujeres también tenemos prototipos ideales, no solo ustedes machitos. Ella dice que le gustan interesantes, que sean buenos amigos y, además, buenos amantes. Remata con “¿qué importan unos años de más?”. Para los hombres pareciera que la edad jamás es tema. Pero una chica que se meta con un macho mayor, es un pecado. Ojo que en no ha hecho referencia al aspecto físico y superficial, en el que suelen hacer hincapié los íconos masculinos del reggaetón.

Y, en su peak, se tira una tremenda declaración que deja al mundo atónito: “a mi me gustan más grandes, que no me quepa en la boca”. El público se vuelve loco, tal como dice nuestro amigo en el video del Tarro. Una mujer siendo tan explícita cuando se refiere al ámbito sexual. Se echa al bolsillo todos los tabúes de la sociedad. ¿Qué importa lo que la gente piense de ella después de esto? Hemos escuchado temas cantados por hombres que son bastante más explícitos que estos. En “Chulo sin H” de Jowell y Randy ft De la Ghetto la canción parte diciendo “Que tengo la polla en candela y quiero comerte ese culo”. Pero nadie se escandalizó tanto por esa afirmación.

Más allá de la letra en particular, este tema nos trae algo mucho más revolucionario. Una mujer que se libera de los prejuicios y que habla sin tapujos de las mismas temáticas que sus compañeros de género musical tratan. No le interesa que los hombres la cuestionen, porque se siente con la misma libertad que ellos de decir lo que siente y lo que piensa.

Una mujer a la que no le interesa ser el ícono sexual de ningún hombre, más bien los pone a ellos en esa posición y los transforma en su propio objeto sexual. Ese es el punto. Hombres, parece que no les gustó ser “la cosa” de alguien más.

Becky G les trae un poco de su propia medicina. Las mismas canciones que ustedes llevan más de 15 años cantándole a las mujeres, ella se las canta a ustedes. Pareciera que ya no son las chicas las exageradas. A nadie le gusta ser el objeto de otro. A nadie le gusta ser propiedad de otro. Pero solo se dieron cuenta cuando les tocó vivir un poco de lo mismo.


Para quienes quieran analizar por su propia cuenta esta canción, les dejo el video (no apto para cardíacos):


Por Renata Valenzuela

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