La ruta rápida de Santiago: Parte III
Por Oscar Garrido Aravena
Hay quienes detestan Santiago. Pero también están aquellos que lo disfrutan. Ciertamente yo estoy en la segunda categoría. Fue recorriendo el barrio Bellas Artes cuando nos pusimos a observar el enorme letrero que cuenta todas las alternativas de sándwiches que tiene Marilyn.
El lugar está ubicado justo en la esquina de José Miguel de la Barra esquina Merced, a un costado del Ópera Catedral. Acá no hay nada más que sándwiches, buenos precios y sabores que sobresalen en comparación a muchas otras alternativas del sector.
El lugar intenta ser una alternativa popular, pero con una calidad gastronómica importante. Todo lo consigue. Tiene amplias barras de mármol que se repletan de comensales a la hora de almuerzo. También hay una terraza con mesas que en las tardes veraniegas reciben mucho sol y que no son una buena opción para comer.
Como soy respetuoso de las costumbres, pedí un Churrasco Tradición. A pesar de que en el lugar no había mucha gente, la preparación demoró en llegar. Fue una buena señal, porque a la distancia podía observar la cocina y a mucha gente trabajando en ella.
El churrasco llegó servido en pan de molde tostado y caliente. Dejé de lado los prejuicios y me atreví a probar el primer bocado. Tenía láminas de palta, rodajas de tomate y mayonesa sobre la carne. No creo tener palabras para describir al mejor churrasco que he probado en el último tiempo.
Ella pidió un Crudo Juliana. No soy muy asiduo a este tipo de preparaciones, pero me animé a probar. Eran varios trozos de filete de vacuno crudo con pimentón rojo asado, alcaparras, hojas verdes y mayonesa al ajillo. Todo en pan ciabatta.
El crudo es servido junto a limón y pimienta. Al combinarlos con la carne, entrega un sabor suave y fresco. Es un sándwich que en el propio local recomiendan y que cumple con creces. Para beber las opciones no son muy variadas, hay cervezas, bebidas y limonadas. Decidimos probar la preparación de limón-menta y el resultado fue positivo. La limonada tenía un sabor fuerte, era fresca y acompañó muy bien al plato.
Todas las preparaciones se sirven junto a papas fritas que son preparadas al limón y perejil. Son servidas en una porción justa y tienen un buen sabor. Existen algunas opciones de postres, pero lo cierto es que es mucho más conveniente buscar otro lugar que sea especialista en dulces, porque en el barrio hay muchos.
Por más que intentemos buscar otra alternativa para comer en Bellas Artes, no lo conseguimos. Las veces que hemos probado otros lugares nos hemos decepcionado, ya sea por los sabores o la atención. Marilyn también es una carta segura. Me atrevería a decir que la más segura de todas y por un precio justo.
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